Roma, ita
La Policía italiana arrestó ayer en Nápoles a Mariano Riccio, de 23 años, quien pese a su juventud era considerado jefe del clan Amato-Pagano de la Camorra, la mafia napolitana, e incluido entre los 100 criminales más buscados en Italia.
Riccio, que tiene pendiente una condena a 16 años de cárcel por asociación criminal y tráfico de droga, fue detenido en un chalet en la periferia del norte de Nápoles, donde vivía en compañía de su novia y su hijo.
En otra operación en Roma fueron detenidas 29 personas, también consideradas integrantes de la Camorra, bajo la acusación de fraude y extorsión.
Estos detenidos, 21 de los cuales fueron encarcelados y otros ocho quedaron bajo arresto domiciliario, pertenecen a la familia “Zaza”, que toma el nombre de uno de los más importantes jefes de la Camorra, Michele Zaza, fallecido en 1994.
En esta operación se confiscaron además 400 millones de euros en bienes adquiridos con dinero de las actividades ilegales.
El grupo había comprado inmuebles de lujo, pero también se había dedicado a abrir hoteles y locales de apuestas.