KIEV, UCR.
Kiev recluta a todos los hombres de hasta 40 años tras la amenaza de invasión de Moscú.
Ucrania se movilizaba para la guerra el domingo con el llamado a filas de todos los reservistas, después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, amenazó con invadir territorio ucraniano en la mayor confrontación entre Moscú y Occidente desde la Guerra Fría.
Esta no es una amenaza: en realidad es una declaración de guerra a mi país”, dijo el primer ministro ucraniano, Arseny Yatseniuk, que encabeza un gobierno proeuropeo en el poder desde que el aliado ruso Viktor Yanukovich fue destituido la semana pasada.
Putin obtuvo permiso de su Parlamento el sábado para usar la fuerza militar para proteger a los ciudadanos rusos en Ucrania, desencadenando llamados de Occidente para que no intervenga.
Fuerzas rusas ya tomaron, sin derramamiento de sangre, el control de Crimea, una aislada península en el mar Negro donde la mayoría de la población es de etnia rusa y donde Moscú cuenta con una base naval.
El domingo rodearon varios pequeños puestos militares ucranianos y les pidieron que entregaran las armas. Algunos se negaron, pero no hubo disparos.
Se ordenó que el Ministerio de Defensa llevara a cabo el reclutamiento, que potencialmente sería de todos los hombres de hasta 40 años en un país que todavía cuenta con un servicio militar masculino obligatorio y universal, aunque Ucrania podría tener dificultades para encontrar armas o uniformes para un número significativo de ellos.
Si el presidente Putin quiere ser el presidente que inició la guerra entre dos países vecinos y amigos, entre Ucrania y Rusia, lo tiene al alcance de la mano. Estamos al borde del desastre”, dijo Yatseniuk en unas declaraciones en inglés televisadas, apelando al apoyo occidental.
Amenaza al este de Ucrania
En la plaza de la Independencia de Kiev, donde los manifestantes que se opusieron Yanukovich acamparon durante meses, miles protestaban contra la acción militar rusa. Algunas pancartas decían: “Putin, quita las manos de Ucrania”.
El este del país, donde la mayoría de los habitantes de etnia ucraniana hablan ruso, supone una preocupación incluso mayor que el hecho de que Rusia controle Crimea.
Hubo violentas protestas en esas áreas el sábado: manifestantes pro rusos izaron banderas en los edificios gubernamentales y llamaron a Moscú a defenderlos. Kiev dijo que las protestas fueron fabricadas por Rusia, acusando a Moscú de enviar cientos de sus ciudadanos al otro lado de la frontera para participar en ellas.
La declaración de Putin de que tiene el derecho de invadir a su vecina Ucrania -para lo que rápidamente recibió la aprobación unánime de su Parlamento- alentó la perspectiva de una guerra en un país de 46 millones de habitantes en Europa central.