Estados Unidos
Una investigación de la Fiscalía General de Illinois reveló que un total de mil 997 niños fueron víctimas de abuso sexual por parte de sacerdotes católicos en un lapso de 69 años.
Un total de 451 clérigos perpetraron los abusos, reportó la dependencia.
La mayoría de ellos reportaron daños en la salud mental.
“Espero que este informe arroje luz tanto sobre aquellos que violaron sus posiciones de poder y confianza para abusar de niños inocentes, como sobre los hombres en el liderazgo de la Iglesia que encubrieron ese abuso”, declaró ayer, el fiscal general, Kwame Raoul, en una conferencia de prensa.
El funcionario del estado reconoció que hay casos expirados y que esos abusadores “nunca verán justicia en un juicio legal”.
“Es posible que estos perpetradores nunca rindan cuentas ante un tribunal de justicia, pero, al nombrarlos aquí, la intención es brindar una responsabilidad pública y una medida de curación a los sobrevivientes que han sufrido en silencio durante mucho tiempo”, agregó, de acuerdo con la cadena de noticias ABC.
Asimismo, el informe publicó por primera vez los nombres de clérigos y hermanos religiosos que, según dijo, habían sido objeto de acusaciones creíbles de abuso sexual.
Este trabajo inició en 2018 por la predecesora de Raoul, la fiscal Lisa Madigan, quien acusó a la Iglesia de dar un menor registro de casos.
Inicialmente, el clero sólo había identificado a 103 abusadores entre sus filas.
“Décadas de decisiones y políticas de liderazgo católico han permitido que abusadores sexuales de niños identificados se escondan, a menudo a plena vista”, dijo Raoul.
Por su parte, el cardenal Blase J. Cupich, arzobispo de Chicago, trató de mitigar las críticas de que la Iglesia no había revelado los nombres de los abusadores identificados en el informe.
El prelado argumentó que la mayoría de los acusados eran miembros de órdenes religiosas que no estaban bajo la supervisión directa de las diócesis.
El informe se suma a una larga lista de investigaciones en todo el mundo sobre abusos sexuales en el seno de la Iglesia católica y la frecuente práctica de encubrir a los abusadores y transferirlos a nuevos destinos, poniendo así en riesgo a más niños.
Los escándalos de abusos han impactado en la reputación de la Iglesia y han supuesto un gran reto para el papa Francisco, quien en los últimos 10 años ha aprobado una serie de medidas encaminadas a responsabilizar más a la jerarquía eclesiástica, con resultados dispares.
Alrededor de 3.5 millones de católicos vivían en Illinois en 2019, según datos de la Conferencia Católica de Illinois.
Esto representa 27% de la población de la entidad, que tiene unas 950 parroquias y más de dos mil 200 sacerdotes.