Un trágico incidente ocurrió en Luisiana, Estados Unidos, cuando un joven estudiante sufrió daño cerebral irreversible después de ser empujado al lago D'Arbonne por sus amigos, quienes sabían que no sabía nadar. Christopher Gilbert, de 26 años, fue empujado del muelle mientras sus amigos observaban sin intervenir. Un video capturó el momento en que el grupo miraba indiferente el incidente.
A pesar de la emergencia, sus amigos no hicieron ningún esfuerzo por salvarlo. Pasaron diez minutos antes de que un cliente de un restaurante cercano interviniera y sacara a Gilbert del agua. Al llegar al hospital local, Gilbert fue diagnosticado con muerte cerebral y sus órganos comenzaron a fallar. Su madre, Yolanda George, describió el impacto devastador que tuvo en su familia esta tragedia.
Especialmente porque Christopher tenía aspiraciones de convertirse en médico y recientemente había completado su maestría en ciencias biológicas. La versión inicial de los amigos implicados intentó minimizar el incidente como un juego brusco, incluso mintiendo a la madre de Gilbert sobre lo sucedido. Sin embargo, posteriormente una mujer admitió haber empujado a Gilbert al lago.
A pesar de esto, ninguno de sus amigos admitió saber que él no sabía nadar, una afirmación que la familia considera poco creíble. La abogada Claudia Payne, que representa a la familia, señaló que ninguno de los amigos hizo intentos de rescate después del incidente, lo que sugiere intenciones criminales. Actualmente, Gilbert muestra señales de actividad cognitiva.
Sin embargo, no puede hablar y sigue dependiendo del soporte vital debido a la grave afectación pulmonar. La familia está exigiendo acciones legales contra los responsables y busca justicia para Christopher, quien ha experimentado un largo camino hacia la recuperación desde este cruel ataque.