En el Hospital Barão de Lucena, ubicado en el barrio de Iputinga, en la Zona Oeste de Recife, Brasil, tras apenas cuatro horas de haber llegado al mundo, un bebe recién nacido fue rozado por una bala perdida. El suceso tuvo lugar en mientras los padres se encontraban en la sala de pediatría del quinto piso del hospital.
Los recién padres escucharon un sonido inesperado. Fue seguido rápidamente por el llanto de la recién nacida, que alertó a sus padres, Luís Guedes y su esposa. Desconcertados se apresuraron a levantar a su hija, y se percataron que una bala perdida la había rozado, así narro la trágica experiencia el padre de familia.
En esa misma habitación, se encontraban otros dos recién nacidos. El padre buscó ayuda de los policías militares presentes en el hospital, quienes respondieron al llamado de emergencia. Su intervención fue crucial para asegurar la zona y garantizar la seguridad de los pacientes y el personal médico.
Afortunadamente, el bebé fue atendido de inmediato por un neonatólogo experto, quien realizó las evaluaciones necesarias para determinar su estado de salud. Para alivio de todos, se confirmó que la pequeña se encontraba en buen estado.
La Policía Militar ha señalado que el disparo probablemente provino de la calle y también anunció que el caso está siendo investigado activamente por la Comisaría de Cordero, y se tomarán todas las medidas necesarias para esclarecer lo sucedido.