Alfred W. Ruf, un hombre de 71 años de Indiana, Estados Unidos, admitió haber intentado asesinar a su esposa envenenando su Coca-Cola con una mezcla de narcóticos. Su plan consistía en envenenar a su esposa en múltiples ocasiones para poder huir con su hijastra, con quien pretendía casarse. Este complot, que comenzó a finales de 2021, fue parcialmente facilitado por la hijastra de Ruf y una amiga, quienes le proporcionaron las drogas utilizadas.
Ruf confesó que era consciente de que la mezcla de sustancias sería mortal y que su objetivo final era matar a su esposa para beneficiarse de su póliza de seguro de vida. Según documentos judiciales, cada dosis de la mezcla dejaba a la esposa inconsciente durante aproximadamente 13 horas. Durante estos períodos, la hijastra y una amiga de Ruf supuestamente aprovechaban la situación para mantener relaciones íntimas con él.
La esposa de Ruf notó irregularidades tras ser hospitalizada varias veces y dar positivo por sustancias que no había consumido. Encontró residuos en una lata de Coca-Cola que había bebido y denunció el incidente a la policía. Ruf fue arrestado después de que la policía iniciara una investigación sobre las acusaciones, aunque no se han realizado arrestos adicionales en relación con la hijastra y su amiga.
En el juicio, Ruf se declaró culpable de agresión agravada con riesgo de muerte y fue condenado a cuatro años de prisión. Como parte del acuerdo de culpabilidad, el cargo de conspiración para cometer asesinato fue retirado.