En Montverde, Florida, la noticia del fallecimiento de Jamaria Sessions, una niña de 9 años, conmocionó a la localidad. El 17 de junio, en la calle Harbar Oaks Drive, Jamaria residía con Tyshael Elise Martin, la novia de su padre. La niña fue encontrada inconsciente, su cuerpo presentaba múltiples signos de violencia de distintos tipos.
Las autoridades del Condado de Lake iniciaron una investigación exhaustiva, que incluyó la revisión de las grabaciones de las cámaras de seguridad de la casa. Las imágenes revelaron un panorama escalofriante, donde Martin, de 34 años, presuntamente instigaba un ataque brutal de su rottweiler de 103 libras contra la pequeña Jamaria, mientras la sujetaba con la correa.
La escena mostraba a la niña inmóvil en el suelo, mientras Martin la pateaba repetidamente y, posteriormente, arrastraba su cuerpo casi sin vida por el piso, golpeándola y sacudiéndola. Las grabaciones incluían un inquietante audio, en el que presuntamente se escuchó a Martin decir: "Estoy a punto de matarla".
La investigación, que incluyó entrevistas, videos adicionales y mensajes de texto, reveló un patrón de abuso sistemático que Jamaria sufría. Los castigos a los que la niña era sometida iban desde permanecer de pie en la pared durante largos periodos y muchas violencias desde físicas hasta psicológicas.
El resultado de la autopsia, que se dio a conocer el martes, confirmó la tragedia: la causa de muerte fue por complicaciones derivadas de múltiples lesiones contundentes en la cabeza, el torso y las extremidades, así como una lesión térmica en su pie derecho. El forense calificó la muerte como homicidio.
Martin fue arrestada bajo una orden judicial y trasladada a la cárcel del condado de Lake, donde se encuentra detenida sin derecho a fianza. La comunidad de Montverde, aún conmocionada por el trágico destino de Jamaria, busca respuestas en medio de la oscuridad.