¿Te imaginas ir a tu tienda de autoservicio favorita y no encontrar cigarros? Pues esto es exactamente lo que está pasando en Stop & Shop, la cadena de supermercados que opera en el noreste de Estados Unidos. A partir de agosto, la empresa dejará de vender cigarros y productos de tabaco en sus 360 tiendas, como parte de su compromiso con la salud de la comunidad.
Desde nuestro equipo de dietistas registrados que atienden a nuestros clientes sin costo alguno, hasta nuestros asociados de farmacia capacitados y de confianza, Stop & Shop tiene como objetivo apoyar la salud y el bienestar de los vecindarios a los que servimos, y esta salida del tabaco es una forma más en la que logramos ese objetivo, dijo Gordon Reid, presidente de Stop & Shop, en un comunicado.Esta decisión ha generado diversas reacciones. La directora de farmacia de Stop & Shop, Katie Thornell, explicó que los farmacéuticos de la empresa pueden brindar orientación para dejar de fumar y recomendaciones de inmunización para aquellos que pueden tener una inmunidad baja como resultado del tabaquismo. "Sabemos que el tabaquismo es una adicción y estamos aquí para ayudar a las personas a superar este hábito", dijo Thornell.
Sin embargo, no todos están convencidos de que esta sea una decisión puramente altruista. Juda Engelmayer, CEO de HeraldPR, cree que se trata de una estrategia de relaciones públicas para atraer clientes que buscan opciones más saludables. "Stop & Shop necesita destacarse de la competencia en el sector de las tiendas de comestibles", argumentó Engelmayer.
A pesar de las diversas opiniones, la decisión de Stop & Shop de dejar de vender tabaco ha sido aplaudida por organizaciones como la American Cancer Society.
Este movimiento es un paso en la dirección correcta hacia el fin de la influencia de Big Tobacco en los niños, dijo Karen Knudsen, directora ejecutiva de la organización.En última instancia, la decisión de Stop & Shop de dejar de vender cigarros y productos de tabaco refleja una tendencia cada vez más creciente en el sector minorista, donde las empresas buscan ofrecer opciones más saludables a sus clientes. Esta decisión podría tener un impacto significativo en la salud pública, especialmente en comunidades con altos índices de tabaquismo.