La familia de Jahmeik, devastada por la pérdida, ha decidido emprender acciones legales contra la Administración de Servicios Infantiles de la Ciudad de Nueva York (ACS), acusándola de negligencia y de ignorar señales de advertencia que podrían haber salvado la vida del pequeño.
Jahmeik, quien pesaba apenas 19 libras cuando fue encontrado sin vida el 13 de octubre, se convirtió en símbolo de la vulnerabilidad de los niños en la ciudad. Su tía, Nyisha Ragsdale, quien presentó una demanda contra ACS por 40 millones de dólares, asegura que la agencia tenía conocimiento de la situación del niño y de sus hermanos, pero no actuó a tiempo.
Quiero agradecer a la gente de Nueva York por su solidaridad en nombre de la familia. Era un niño maravilloso: jugaba, reía, sonreía, dijo Ragsdale durante una conferencia de prensa.
Nyisha Ragsdale reveló que ACS había investigado en 2022 denuncias de abuso por parte de los padres de Jahmeik, pero las desestimó. Posteriormente, la madre del niño, Nytavia Ragsdale, solicitó ayuda a la agencia, pero no recibió respuesta.
"Esperamos poder tomar declaración a ACS, al personal de ACS, con respecto a cómo pudo haber ocurrido esta terrible muerte por negligencia", dijo el abogado de la familia, Sanford Rubenstein.
Tanto Nytavia Ragsdale como el padre del niño, Laron Modlin, fueron arrestados y acusados de homicidio involuntario y de poner en peligro el bienestar de un niño. La familia extendida de Jahmeik asegura que no tenía conocimiento de las condiciones de vida dentro de la casa, pero la agencia sí.
El alcalde Eric Adams, conmovido por el caso, reconoció la gravedad de la situación y expresó su pesar por la pérdida de Jahmeik. "Sé que tenemos un grupo de profesionales que trabajan duro y que no quieren perturbar a las familias, pero que les gustaría entrar y tomar las medidas necesarias para proteger a los niños... todos sentimos dolor por que algo así haya sucedido", declaró Adams.
La muerte de Jahmeik Modlin ha desatado un debate sobre la eficacia de ACS y la seguridad de los niños en la ciudad de Nueva York. La familia del niño espera que la demanda contra la agencia sirva para exigir justicia y garantizar que tragedias como esta no se repitan.