Una fuerte tormenta invernal se encuentra en desarrollo al este de las Montañas Rocosas y se trasladará al norte de Nueva York, donde se anticipan nevadas entre el jueves 21 y el sábado 23 de noviembre. Este fenómeno, conocido como nieve por efecto lago, ha sido confirmado por el Servicio Meteorológico Nacional (NWS).
Las tormentas de nieve por efecto lago generalmente se forman en otoño e invierno, cuando las masas de aire frío atraviesan las aguas cálidas de los Grandes Lagos. Este proceso provoca lluvias intensas en las áreas circundantes. Según el Centro de Predicción Climática del NWS, la tormenta invernal en desarrollo se moverá hacia el noreste, lo que podría activar las nevadas en la región.
Se espera que el fenómeno climático alcance su punto máximo hacia finales de esta semana, afectando principalmente a zonas como Tug Hill y el oeste de Nueva York. Las posibilidades de acumulaciones significativas de nieve en estas áreas varían entre el 20% y el 40%, según informes de Infobae. La interacción entre el aire frío proveniente de Canadá, las temperaturas cálidas del agua y los vientos de la tormenta será crucial para determinar la magnitud de las nevadas.
Este fenómeno no solo podría generar problemas en el norte de Nueva York, sino que también complicará el tránsito en diversas regiones del noreste de Estados Unidos, coincidiendo con una de las semanas de mayor movilidad debido al Día de Acción de Gracias. El FOX Forecast Center ha indicado que los vientos fuertes y las nevadas podrían afectar negativamente el tránsito vehicular y las operaciones aéreas en el noreste y el medio oeste.
El norte del estado, especialmente en áreas como Tug Hill y el oeste de Nueva York, enfrenta un riesgo moderado de nevadas importantes, con un 40% de posibilidades de acumulaciones significativas. En el norte del estado, el riesgo es más bajo, pero no se descarta, con un 20% de probabilidades. Además, el impacto podría extenderse hacia el noreste, incluyendo áreas del Valle de Ohio, dependiendo de la trayectoria de los vientos y la cantidad de aire frío disponible.
Los meteorólogos advierten que la intensidad de las nevadas por efecto lago dependerá de varios factores, como la temperatura del aire, la temperatura del agua de los lagos y la dirección de los vientos. El NWS señala que estos eventos son difíciles de predecir con precisión debido a su naturaleza compleja. Se recomienda a los ciudadanos de Nueva York en las zonas afectadas que se mantengan informados sobre las actualizaciones del pronóstico y que se preparen para condiciones invernales que podrían impactar la movilidad y los servicios básicos.
Los funcionarios locales instan a los residentes a verificar las condiciones de las carreteras antes de viajar y a considerar ajustes en sus planes de traslado si las tormentas se intensifican.