Recientemente, se confirmó el primer caso de la variante clado I en Estados Unidos, específicamente en California. El paciente, un viajero que llegó de África oriental, se encuentra en aislamiento mientras se recupera. Esta variante, que ha sido identificada principalmente en regiones de África central y oriental, se considera más peligrosa que la cepa que causó el brote global de 2022.
El Mpox, una enfermedad zoonótica relacionada con la viruela, presenta dos variantes principales: el clado I, que es más letal, y el clado II, que fue responsable del brote reciente. En particular, el clado I, y su subclado Ib, han mostrado tasas de mortalidad que oscilan entre el 3% y el 11%. Sin embargo, estas cifras han disminuido en contextos fuera de África gracias a la mejora en los cuidados médicos.
La transmisión del clado I se ha observado principalmente entre adultos a través del contacto íntimo, lo que ha elevado las preocupaciones sobre su propagación local. A pesar de su gravedad, el clado I no se considera altamente contagioso sin contacto cercano. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), el virus se transmite principalmente a través de contacto directo con lesiones cutáneas, fluidos corporales o superficies contaminadas.
En el caso del subclado Ib, las relaciones sexuales han sido identificadas como una de las principales vías de transmisión. A pesar de la gravedad de esta variante, las autoridades han indicado que el riesgo de un brote significativo en Estados Unidos sigue siendo bajo, gracias a la rápida identificación de casos y la falta de propagación comunitaria.
Sin embargo, el impacto del Mpox no se limita a adultos. En África, se han reportado casos de transmisión en el hogar, afectando también a niños. La situación en la República Democrática del Congo (RDC) es alarmante, con más de 12,000 casos y al menos 47 muertes desde enero de 2024. Aunque los casos fuera de África han sido limitados, algunos han sido vinculados a viajeros, lo que sugiere que la cepa podría propagarse globalmente si no se implementan medidas preventivas adecuadas.
Para mitigar la propagación del Mpox, tanto los CDC como la Organización Mundial de la Salud (OMS) han recomendado la vacunación, especialmente para aquellos en riesgo. La vacuna Jynneos, diseñada para combatir la viruela, ha demostrado ser eficaz contra ambas variantes del virus. Aunque quienes recibieron la vacuna durante el brote de 2022 tienen cierta protección, no se garantiza una inmunidad completa contra el clado I.
Las autoridades de salud en Estados Unidos están monitoreando de cerca el único caso confirmado en California, sin detectar propagación adicional en la comunidad. Se están realizando seguimientos a las personas que tuvieron contacto con el paciente. A pesar de que la amenaza del Mpox clado I es actualmente baja en el país, los expertos subrayan la importancia de mantener la vigilancia y adoptar medidas preventivas.