La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha estado monitoreando la situación y ha confirmado que la enfermedad sigue siendo una emergencia de salud pública de importancia internacional. La "mpox", también conocida como viruela símica, ha sido objeto de preocupación desde agosto, cuando un brote se propagó desde la República Democrática del Congo a los países vecinos.
Según la OMS, la situación sigue siendo grave debido a la propagación continua de la enfermedad, los desafíos operativos sobre el terreno y la necesidad de una respuesta coordinada entre los países y sus aliados internacionales. La directora general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha ratificado la decisión de mantener la alerta.
La viruela símica es una infección viral que se transmite por contacto íntimo y puede ser mortal. En África, se han registrado más de 46,000 casos sospechosos este año, particularmente en la región del Congo, donde se han producido más de 1,000 muertes relacionadas con la enfermedad.
La OMS ha intensificado sus esfuerzos para controlar la propagación del virus, incluyendo la aprobación de vacunas para su uso de emergencia. A pesar de las críticas iniciales, la OMS ha aumentado las opciones disponibles para combatir la enfermedad a nivel mundial.
Entre las medidas adoptadas por la OMS se encuentran:
- La aprobación de la vacuna de Bavarian Nordic para su uso contra el "mpox".
- La inclusión en la lista de vacunas de uso de emergencia de la vacuna de KM Biologics de Japón.