Trump aseguró que está dispuesto a utilizar al Ejército para atrapar y deportar a 11 millones de migrantes indocumentados, a pesar de que la ley Posse Comitatus Act establece que los militares no pueden participar en labores civiles. El expresidente argumentó que la ley "no detendrá a los militares si se trata de una invasión de nuestro país".
En cuanto a la legalidad de utilizar al Ejército para trabajos de migración, Trump remarcó que en caso de que los militares se opongan a sus órdenes, solo él haría "lo que la ley permite", pero sí dijo que llegará "al nivel máximo" que este consienta.
Desde el pasado 18 de noviembre, Trump aseguró que declararía estado de emergencia nacional para poder cumplir su promesa de la deportación masiva más grande de la historia de Estados Unidos. Su política migratoria incluye reforzar la frontera con México a través de órdenes ejecutivas, poner un fin al programa "capturar y liberar" y reanudar la construcción del muro.
Trump también aseguró que no tiene planes de restaurar la política de separar a las niñas y niños de sus padres para disuadir a sus familiares de cruzar la frontera. "No creo que sea necesario, porque enviaremos a toda la familia de vuelta", expuso.
Entre las medidas que Trump ha anunciado para abordar la situación migratoria se encuentran:
- Declarar estado de emergencia nacional para poder cumplir su promesa de la deportación masiva más grande de la historia de Estados Unidos.
- Reforzar la frontera con México a través de órdenes ejecutivas.
- Poner un fin al programa "capturar y liberar".
- Reanudar la construcción del muro.
La política migratoria de Trump ha generado controversia y preocupación entre los defensores de los derechos humanos y los migrantes. Su enfoque en la seguridad fronteriza y la deportación de migrantes indocumentados ha sido criticado por ser demasiado duro y poco efectivo.