El ambiente festivo se vio interrumpido, sin embargo, por un evento que generó preocupación.Poco después de las 4 p.m., en la intersección de la 6ta Avenida y la calle 34 Oeste, un taxi amarillo, conducido por un hombre de 58 años, experimentó un "episodio médico no especificado," según reportes de ABC News. Este episodio provocó que el vehículo se desviara de su trayectoria, subiendo a la acera y arrollando a seis peatones.
Entre las víctimas, dos mujeres adultas y un niño resultaron heridas. Una mujer de 41 años y un niño de 9 fueron trasladados al NewYork-Presbyterian/Weill Cornell Medical Center. Otra mujer, de 49 años, fue llevada a NYC Health + Hospitals/Bellevue. Afortunadamente, ninguno de ellos sufrió lesiones de gravedad y sus nombres no han sido revelados por las autoridades. Tres mujeres más, de 19, 37 y 49 años, rechazaron atención médica en el lugar.
Testigos relataron escenas de pánico. Un turista de Oregon, describió cómo el taxi golpeó a su esposa y cómo ayudó al niño, quien sufrió una lesión en la pierna. Señaló también que la madre del menor fue impactada por el vehículo. La policía confirmó que el conductor fue trasladado al NYC Health + Hospitals/Bellevue para una evaluación médica completa.
El incidente ocurrió en una zona de altísima densidad peatonal, a pocas cuadras de Times Square. Este hecho, junto con otros recientes en Alemania y Londres que involucran vehículos impactando multitudes en mercados navideños, desató una ola de especulaciones iniciales sobre la intencionalidad del acto. Sin embargo, las investigaciones preliminares apuntan a que se trató de un accidente, derivado de la emergencia médica del conductor.
Cabe destacar que Nueva York espera recibir 7.5 millones de visitantes entre Acción de Gracias y Año Nuevo, lo que genera una congestión inmensa en las calles y un incremento en la vigilancia policial. Este suceso sirve como un recordatorio de la importancia de la seguridad vial, tanto para conductores como para peatones, especialmente durante las temporadas de alta afluencia turística.
Las autoridades locales reiteran su política de cero tolerancia con conductores que manejan bajo los efectos de alcohol o drogas, o a exceso de velocidad. Además, hacen énfasis en la necesidad de que ciclistas y motociclistas respeten las normas de tránsito para evitar este tipo de incidentes.