Boom Supersonic: Vuelo supersónico silencioso revoluciona la aviación

El pasado 10 de febrero de 2025, la atención mundial se centró en el XB-1, un avión que no es solo una máquina voladora, sino un símbolo de la ambición humana por superar límites.
Desarrollado por Boom Supersonic, este avión de demostración, pilotado por Tristan “Geppetto” Brandenburg, realizó su segundo vuelo supersónico. Pero este vuelo no fue cualquier evento rutinario; fue una colaboración entre Boom Supersonic y la NASA, con resultados asombrosos.
La clave está en una técnica llamada fotografía Schlieren. Esta tecnología, empleada por equipos de la NASA desde tierra, permitió capturar una imagen impactante: las ondas de choque del XB-1 al romper la barrera del sonido, visibles gracias a la precisa ubicación del avión frente al sol.
“Esta imagen hace visible lo invisible,” declaró Blake Scholl, fundador y CEO de Boom Supersonic. “El primer avión supersónico civil de fabricación estadounidense que rompe la barrera del sonido.”
Pero la relevancia de este evento va más allá de la fotografía. Los datos recabados, usando micrófonos y otros dispositivos en puntos estratégicos, confirmaron algo crucial: el vuelo no produjo un estruendo sónico audible en tierra.
Este hallazgo no es trivial. Según Scholl, esto “allana el camino para vuelos de costa a costa hasta un 50% más rápidos.” La precisión en la maniobra del XB-1, descrita como de “extrema precisión” por la empresa, fue vital para el éxito de la prueba.
La información obtenida se utilizará para integrar el "Boomless Cruise" en el Overture, el avión supersónico comercial de Boom Supersonic. Se espera que el Overture pueda alcanzar velocidades de Mach 1.3 sin explosión sónica, reduciendo los tiempos de vuelo transcontinentales en hasta 90 minutos.
Con pedidos anticipados de gigantes como United Airlines, American Airlines y Japan Airlines, el futuro de los viajes supersónicos parece prometedor. El XB-1, tras concluir su programa de pruebas, regresará a Denver, Colorado, mientras el enfoque se centra en la construcción del Overture, una nueva era en la aviación comercial.