Pasajero agresivo desata caos en vuelo Plus Ultra Madrid-Caracas

Este sábado, en el Vuelo 701 de Plus Ultra, un Airbus A330 que cubría la ruta Madrid-Caracas, la calma se vio interrumpida por un pasajero. Su identidad no ha sido revelada por razones de privacidad, pero fuentes de la aerolínea han confirmado a Infobae España que el individuo presentó "aparentes síntomas de alteración mental".
Inicialmente, el incidente se manifestó como una molestia menor. Según la aerolínea, el pasajero comenzó a inquietarse, "molestando a la persona que iba en la butaca contigua con gritos y propinándole manotazos mientras estaba dormido". Ante esta situación, la tripulación decidió reubicarlo para evitar más problemas. Sin embargo, la situación escaló rápidamente.
El pasajero, inesperadamente, se dirigió a una de las puertas de la cabina e intentó abrirla. Esto provocó una reacción inmediata por parte de la tripulación. "Nuestro personal de cabina redujo al pasajero y lo aseguró en la parte trasera del avión", explicaron desde Plus Ultra. La acción, aunque necesaria, tuvo consecuencias: un miembro de la tripulación sufrió una fractura parcial de peroné al intentar controlar al pasajero.
A pesar del susto y la tensión a bordo, la aerolínea enfatiza que "en ningún caso la seguridad del vuelo ni de quienes viajaban a bordo se vio comprometida". Este hecho se debe a la presión atmosférica a 10.000 pies de altitud y a los sistemas de seguridad de los aviones modernos que dificultan, casi imposibilitan, la apertura de puertas en vuelo.
Sin embargo, es importante recordar que aunque excepcional, existen antecedentes de aperturas de puertas de emergencia en vuelo. Un caso reciente, en un Airbus A321 de Asian Airlines, ilustra cómo la altitud juega un rol crucial en la dificultad o facilidad de este acto. En este caso, la puerta se abrió durante la aproximación final al aterrizaje.
El pasajero del vuelo Madrid-Caracas fue entregado a las autoridades al llegar a Caracas. El miembro de la tripulación herido recibe atención médica y se espera su pronta recuperación. El incidente, sin duda, dejó una huella imborrable en la memoria de los pasajeros y refleja la importancia de la capacitación y la rápida respuesta de la tripulación en situaciones de emergencia.