Trump anula indultos de Biden: crisis constitucional en Estados Unidos

El centro de la controversia gira en torno a Donald Trump y su decisión de declarar nulos los indultos otorgados por el expresidente Joe Biden a los miembros de la Comisión Selecta del 6 de enero. Estos indultos, anunciados minutos antes de la toma de posesión de Trump el 20 de enero, protegían a los congresistas que investigaron la participación del entonces presidente electo en el asalto al Capitolio.
Según Trump, los indultos son "nulos, vacantes y carecen de efecto y validez, debido a que fueron realizados por autopen", un dispositivo de firma automática. Esta declaración se apoya en un informe de la Heritage Foundation, un think tank conservador. Sin embargo, el argumento de Trump contradice un precedente judicial de 1929, en el cual el Departamento de Justicia estableció que el método de otorgamiento de indultos depende "totalmente del presidente". Incluso un tribunal federal de apelaciones determinó el año pasado que los indultos presidenciales ni siquiera necesitan ser escritos.
El Artículo II de la Constitución de los Estados Unidos otorga al presidente el "poder de conceder indultos y perdones". La afirmación de Trump ignora este fundamento legal y la opinión de la judicatura, generando cuestionamientos sobre su respeto al orden constitucional. Entre los indultados se encuentra la excongresista republicana Liz Cheney, una figura a menudo criticada por Trump.
La decisión de Trump llega tras una semana de fuertes confrontaciones con el sistema judicial. El viernes pasado, el presidente pronunció un discurso en el Departamento de Justicia, llamando a procesar a sus adversarios políticos. Posteriormente, ignoró una orden judicial federal que le ordenaba detener las deportaciones de inmigrantes, acción que llevó a la deportación de varios individuos a El Salvador, donde fueron recluidos en el CECOT, un centro de internamiento.
Mientras algunos de los congresistas indultados declararon públicamente que no necesitaban el perdón presidencial, la decisión de Trump de anular los indultos anticipa potenciales investigaciones y enjuiciamientos. La situación deja en evidencia una creciente polarización política y una tensión palpable entre los poderes ejecutivo y judicial en Estados Unidos.