Starbase: nueva ciudad de Elon Musk en Texas

En el Condado de Cameron, específicamente en la zona conocida como Boca Chica, el pasado sábado se produjo un evento con gran repercusión: la aprobación de la incorporación de una nueva ciudad. Starbase, un nombre que ya evoca ambiciones futuristas, es ahora oficialmente una realidad tras una votación que contó con 212 votos a favor y solo 6 en contra, según datos oficiales del Departamento de Elecciones del Condado. El impulsor de este proyecto no es otro que Elon Musk, quien celebró el resultado en su red social X, declarando que Starbase “es ahora una ciudad real”.
Más del 80% de los 283 votantes registrados, en su mayoría empleados de SpaceX, apoyaron la propuesta. De hecho, solo diez propiedades residenciales en la zona no pertenecen a la empresa o a sus empleados, según el Washington Post. Esta particularidad revela la fuerte influencia de SpaceX en la administración de esta naciente ciudad.
La creación de Starbase no es un capricho; se trata de una estrategia a largo plazo. Desde 2012, SpaceX ha adquirido terrenos, construyendo instalaciones de vanguardia, incluyendo una imponente torre de lanzamiento de 146.3 metros, una planta de producción y un sitio de pruebas. Este complejo se ha convertido en un importante puerto espacial comercial, pionero en misiones orbitales.
Para Kathryn Lueders, gerente general de SpaceX Starbase, la incorporación permitirá “hacer crecer la comunidad”, gestionando de manera eficiente carreteras y servicios públicos, además de facilitar el acceso a la educación y atención médica. SpaceX ya gestionaba informalmente muchos de estos servicios, pero la municipalización les otorga mayor autonomía en decisiones cruciales, como la controvertida posibilidad de cerrar la playa pública durante los lanzamientos. SpaceX argumenta que esto mejora la seguridad de sus operaciones.
El proyecto se alinea con la visión de Musk de desarrollar un sistema de transporte espacial reutilizable, con miras a la eventual colonización de Marte. Como declaró Musk en 2019, “construir un vehículo espacial reutilizable en Boca Chica contribuiría directamente a este objetivo”.
El apoyo al proyecto ha sido considerable. El estado de Texas invirtió 15.3 millones de dólares para ayudar a SpaceX a establecer sus instalaciones, según el Washington Post. Figuras como el juez del condado de Cameron, Eddie Treviño Jr., aprobaron la petición de incorporación y programaron la votación, afirmando la colaboración eficiente entre el condado y SpaceX.
Sin embargo, no todos ven con optimismo el surgimiento de Starbase. Organizaciones ambientalistas y residentes han expresado preocupaciones sobre el impacto ambiental de las operaciones de SpaceX. Christopher Basaldú, cofundador de la Red de Justicia Ambiental del Sur de Texas, teme que la nueva ciudad pueda agravar problemas ambientales preexistentes. De hecho, en 2024, la Agencia de Protección Ambiental multó a SpaceX por violaciones a la Ley de Agua Limpia. Además, la demanda por contaminación presentada por el grupo SaveRGV, aunque posteriormente retirada, refleja la existencia de inquietudes en la comunidad.
Residentes como Celia Johnson han denunciado tácticas de presión para la adquisición de propiedades y el cierre recurrente del acceso a las playas, impactando a familias que las han disfrutado por generaciones.