Ventas de Tesla caen 13,5 % tras ruptura entre Musk y Trump

Tesla ha experimentado una caída significativa en sus ventas durante el segundo trimestre de 2025, registrando una disminución del 13,5 % en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este retroceso se produce en un contexto marcado por la reciente desvinculación de Elon Musk de la Administración de Donald Trump, con quien mantuvo una estrecha relación que ahora parece estar pasando factura a la imagen y desempeño comercial de la compañía. A pesar de que Musk se retiró oficialmente de su papel en la Casa Blanca a finales de mayo, los efectos negativos derivados de su incursión en la política estadounidense continúan afectando la confianza de los clientes.
Durante estos meses, Tesla entregó 384.122 vehículos, frente a los 443.956 unidades entregadas en el segundo trimestre de 2024. Este descenso se produce pese a los esfuerzos de la empresa por renovar su gama de productos, que incluyeron actualizaciones en modelos como el SUV Model Y, el Cybertruck y las versiones de lujo Model S y Model X. Además, Tesla inició en junio una prueba piloto de su servicio de robotaxis en Austin, Texas, sin embargo, estas innovaciones no lograron contrarrestar el impacto de la competencia creciente de fabricantes como BYD, General Motors, Volkswagen y BMW.
La vinculación de Musk con Trump generó una fuerte polémica que se tradujo en protestas y actos vandálicos contra concesionarios y estaciones de carga de Tesla, afectando la percepción pública de la marca. Su gestión en el Departamento de Eficiencia Gubernamental, orientada a recortes y cierres de agencias federales, resultó muy impopular y contribuyó a deteriorar la imagen del empresario y su empresa. A pesar de que Musk anunció su alejamiento gradual del Gobierno desde abril, el daño a la reputación de Tesla parece aún persistente, reflejándose en los resultados financieros.
Finalmente, el abrupto distanciamiento entre Musk y Trump tras la oposición del empresario a la reforma fiscal promovida por el presidente añade un nuevo capítulo a esta compleja relación. La disputa pública, alimentada a través de redes sociales, ha profundizado la incertidumbre sobre el futuro político y empresarial de Musk. Por ahora, la esperada recuperación de Tesla no se ha materializado, y los próximos trimestres serán determinantes para evaluar si la compañía logra superar esta etapa adversa y recuperar la confianza del mercado y sus consumidores.