El Diario de SonoraCD. DE MÉXICO
En la actualidad existen diversos tipos de motorizaciones para los autos que podemos comprar. Los principales, son los de gasolina, diésel, eléctricos e híbridos. Sin embargo, aquellos que utilizan o se auxilian de energía eléctrica, resultan de momento (al precio de compra), los más costosos de todos.
Para los que cuentan con un motor de combustión interna, las cosas son un tanto distintas, y pocas veces se habla de cuál de los dos resulta a la larga, el más accesible.
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A ELEGIR
Lo cierto es que al final, tus hábitos de conducción serán los que determinen con qué tipo de coche gastarás menos a la larga. Si te interesa saber las diferencias presta atención al perfil de cada tipo de propietario, para que decidas cómo será tu próximo auto.
PRECIO
En promedio, un coche con motor diésel costará alrededor de 30% más que uno a gasolina. Por naturaleza este tipo de motorizaciones aumenta su costo al ser menos comunes.
Además, cuando debas repararlos, las piezas de los diésel te costarán más que las de uno a motor de gasolina, es un factor que debes considerar, aunque por naturaleza, los primeros se descomponen –en teoría- menos veces que los segundos. Por supuesto, tus hábitos de conducción incidirán en las veces que debas llevarlos al mecánico.
PRECIO DIRECTO DE LOS TIPOS DE COMBUSTIBLES
Generalmente, el precio del diésel se encuentra entre la tarifa de las gasolinas Magna y Premium. Debes considerar, entonces, que repostar combustible será más caro que utilizar Magna, pero más barato que recargar del segundo tipo de combustible.
POR TIPO DE TRAYECTOS
La gran ventaja de los coches a diésel, se da cuando el conductor acostumbra a realizar más trayectos largos o en carretera. El funcionamiento de sus motores privilegia la reducción del uso de combustible a mayores velocidades, a diferencia de los de gasolina.
En cambio, si acostumbras a viajar más en ciudad, es posible que uno de gasolina se sea más conveniente.
PRECIO DE REVENTA
Una verdad innegable entre ambos tipos de autos, es que los de diésel tienen un precio de reventa superior (comparado con modelos de años similares) en relación a los de gasolina. Al final, si lo conservas en mejor estado, obtendrás más por tu inversión al momento de cambiar de coche.
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