El miércoles, a las 8:50 de la mañana, cerca de Malpaso, Chiapas, el padre José Filiberto Velázquez, director del centro de defensa de derechos humanos Minerva Bello, sufrió un ataque por parte de unos hombres armados, los cuales interceptaron el vehículo en el que viajaba, acompañado de sus escoltas, quienes lograron reaccionar a tiempo y evadir a los criminales, evitando así un incidente de mayor gravedad.
Esta no es la primera vez que el padre Velázquez enfrenta una situación tan peligrosa. El 18 de octubre de 2023, en Guerrero, fue víctima de un atentado a balazos, del cual afortunadamente salió ileso. Lastimosamente, las situaciones así ocurren por su trabajo haciendo labor en defensa de los derechos humanos y su papel en el acuerdo de paz entre los grupos criminales Tlacos y la Familia Michoacana.
Al ir en compañía de mis escoltas, hombres armados intentaron detenernos, pero, por fortuna, los elementos de seguridad reaccionaron y pudieron evadir a los criminales. José Filiberto VelázquezLa rápida reacción de sus escoltas fue muy importante para evitar que pasara algo terrible con una persona que solo busca el bien para los demás. El trabajo del padre Filiberto Velázquez es vital para la promoción de los derechos humanos y la búsqueda de la paz en regiones afectadas por la violencia. Sin embargo, su seguridad personal está en constante riesgo debido a las amenazas que enfrenta. Este incidente en Chiapas se suma a una serie de ataques que demuestran la vulnerabilidad de los defensores de derechos humanos en México.
La resiliencia del padre José Filiberto Velázquez y su compromiso con la justicia continúan siendo una fuente de inspiración, pero también un llamado urgente a la acción para asegurar su seguridad y la de todos los defensores de derechos humanos.