Las inundaciones, las más fuertes en 25 años, dejaron un saldo de 247 unidades productivas de cempasúchil afectadas. El panorama era desalentador, miles de plantas se encontraban bajo el agua, amenazadas por la humedad y los hongos. Para muchos productores, la temporada de Día de Muertos se veía en riesgo.
Ante esta emergencia, Clara Brugada, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, se trasladó hasta Xochimilco para brindar apoyo a los productores afectados. Su presencia, junto a un equipo de funcionarios, era una señal de esperanza. "Se van a entregar insumos fitosanitarios de emergencia que contienen fungicidas y adherentes para enfrentar el problema sobre raíces húmedas y generación de hongos, mismos que pueden tener afectaciones en la planta", explicó Julia Álvarez Icaza, secretaria del Medio Ambiente Capitalino.
Llovió como hace 25 años no había llovido, entonces se juntaron diversos factores que hicieran que colonias completas como Caltongo se vieran afectados, remarcó Brugada.
El apoyo no se limitó a los productores. Las inundaciones también impactaron a las familias. En Xochimilco, 300 viviendas sufrieron daños, mientras que en Milpa Alta, 30 familias se vieron afectadas. El gobierno brindará apoyo con un seguro y una despensa a las familias damnificadas.
La emergencia en Xochimilco, puso en evidencia la vulnerabilidad de la ciudad ante fenómenos meteorológicos cada vez más intensos. Es necesario que la ciudad se prepare para enfrentar estos desafíos y brindar un apoyo efectivo a los sectores más vulnerables.