La propuesta de una elección democrática para jueces y magistrados, impulsada por la presidenta Claudia Sheinbaum, ha desatado una ola de opiniones, generando un diálogo sobre la transparencia y la legitimidad del sistema judicial.
La presidenta ha sido contundente en su postura, denunciando una serie de liberaciones de criminales de alto perfil, como el caso de Vanessa Ballar "F", implicada en el asalto a Plaza Artz Pedregal en 2019. Sheinbaum ha utilizado el término "sabadazo" para referirse a las liberaciones que se dan los fines de semana, apuntando a un posible patrón de corrupción y nepotismo dentro del sistema judicial.
La propuesta de Sheinbaum busca darle a la ciudadanía un papel activo en la elección de quienes administran la justicia. Esta elección, según la presidenta, se llevará a cabo en dos etapas: en 2025 se elegirá la mitad de los cargos judiciales, mientras que la otra mitad se elegirá en 2027.
Para garantizar un proceso transparente y efectivo, se conformarán Comités de Evaluación integrados por expertos de reconocido prestigio. Estos comités, que serán establecidos por los Poderes de la Unión, tendrán la responsabilidad de evaluar y seleccionar a los candidatos para los puestos judiciales.
El camino hacia un Poder Judicial más transparente y responsable parece estar en marcha. La convocatoria para iniciar el proceso de formación de los Comités de Evaluación se emitirá el 16 de octubre por el Congreso de la Unión. Se espera que la participación ciudadana sea un factor crucial en la elección de los futuros jueces y magistrados, y que este proceso marque un punto de inflexión en la búsqueda de una justicia más justa y confiable en México.