Muchos se preguntan: ¿Cómo se asegura que estos programas, una vez convertidos en derechos, no sean utilizados de manera incorrecta?
La respuesta, según la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, se encuentra en la propia reforma. En su conferencia matutina del 28 de octubre de 2024, Sheinbaum aseguró que la reforma busca eliminar cualquier posibilidad de manipulación o uso indebido de los programas. "La convicción es que los programas se han manejado de manera correcta, pero la reforma busca protegerlos para la gente y su correcta operación."
La mandataria explicó que la reforma no solo convierte los programas en derechos, sino que también busca empoderar a los ciudadanos, dándoles conocimiento de sus derechos y evitando así cualquier uso indebido. "Esta reforma busca dar fortaleza a los ciudadanos al empoderarlos y darles conocimiento de sus derechos."
Además, Sheinbaum enfatizó que la reforma constitucional convierte los programas en derechos que cualquier presidente o presidenta que venga después tendrá que cumplir, dado que estarán plasmados en la Constitución. "Con la reforma constitucional, los programas de bienestar se convierten en derechos que cualquier presidente o presidenta que venga después tendrá que cumplir."
La reforma, sin duda, representa un paso importante para garantizar la protección y el buen manejo de los programas de bienestar. Sin embargo, la implementación y el seguimiento de la misma serán cruciales para lograr los objetivos planteados.