Las declaraciones de la presidenta Sheinbaum resaltan un enfoque integral para abordar la problemática. La investigación de casos de presuntas violaciones a los derechos humanos se lleva a cabo de manera independiente a las investigaciones internas que el ejército tiene la obligación de realizar. Esto significa que se ha judicializado un gran número de casos y varios militares ya se encuentran en prisión.
Pero el compromiso no termina ahí. Se ha implementado un programa de instrucción al personal militar que busca inculcarles la importancia de actuar conforme a derecho, respetando el uso racional de la fuerza y los Derechos Humanos. Este programa se lleva a cabo en diferentes niveles de formación militar, desde los planteles de formación hasta los centros de capacitación e incluso los centros de aislamiento.
Para asegurar la transparencia en las investigaciones, se ha establecido que la secretaría de defensa nacional, el ejército, la fuerza aérea y la guardia nacional pongan a disposición de las autoridades toda la información, material, armamento, equipo y vehículos que se requieran. Este compromiso de transparencia incluye la entrega inmediata de los detenidos al Ministerio Público, asegurando que las fiscalías generales de la República, de los estados y la fiscalía general de Justicia militar lleven a cabo las investigaciones correspondientes.
La información proporcionada por la presidenta Sheinbaum, con un enfoque en los detalles clave de la nota, resalta el compromiso del gobierno mexicano de investigar todas las denuncias de violaciones a los derechos humanos por parte de las fuerzas armadas. El objetivo es garantizar que no haya impunidad y se tomen las medidas necesarias para prevenir futuras violaciones.