Las reformas legislativas del 2022 en México, enfocadas en la protección de los derechos laborales de las trabajadoras del hogar, han generado un debate nacional. La obligación de registrar a las trabajadoras del hogar en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), busca garantizar su seguridad social y mejorar sus condiciones de trabajo.
Sin embargo, la implementación de estas medidas ha sido compleja. Si bien, la formalización del sector es un paso fundamental hacia la equidad laboral, la reciente disminución en las afiliaciones al IMSS por parte de los empleadores ha generado preocupación.
Esta situación refleja el desafío de implementar plenamente las nuevas regulaciones y lograr un cambio cultural que promueva un entorno de trabajo más justo y equitativo para las trabajadoras del hogar.
El Centro Nacional para la Capacitación Profesional y Liderazgo de las Empleadas del Hogar (CACEH Nacional) ha propuesto un nuevo tabulador salarial para el 2023, con diferentes categorías salariales según la complejidad de las tareas.
Las reformas, a pesar de sus buenas intenciones, han generado diversas reacciones. Algunas trabajadoras del hogar han experimentado mejoras en sus condiciones laborales, pero otros empleadores han expresado inquietudes sobre el aumento de costos.
Es fundamental que la implementación de las reformas sea efectiva para garantizar que las trabajadoras del hogar reciban un trato digno y respetuoso, y que se cumplan las nuevas normativas. La formalización del sector implica un cambio profundo en la mentalidad de empleadores y trabajadores, y se requiere un esfuerzo conjunto para lograr un futuro laboral más justo y equitativo.