En medio de un panorama internacional turbulento, México se prepara para afrontar una nueva etapa en su relación con Estados Unidos. Aunque las tensiones comerciales parecen latentes, el gobierno mexicano se muestra firme y confía en la fortaleza de la economía mexicana.
"No seremos un gobierno pesimista", declaró el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, en una reciente conferencia de prensa.
Ebrard, con un tono confiado y pragmático, explicó que las exportaciones de México a Estados Unidos han experimentado un crecimiento constante, superando incluso la tasa de crecimiento de la economía estadounidense. "Es una buenísima noticia, ¿cuántos países quisieran tener esa cifra?", señaló, enfatizando que este crecimiento no es un fenómeno pasajero, sino una tendencia irreversible.
El secretario de Economía también recordó que Estados Unidos ya ha amenazado con imponer aranceles a México en el pasado, pero que las negociaciones han logrado evitar su aplicación. "Hemos aprendido a negociar, y sabemos que estos desafíos no son nuevos", aseguró, destacando que México ha demostrado su capacidad para afrontar situaciones complejas y llegar a acuerdos favorables.
En cuanto a la llamada telefónica entre la presidenta Claudia Sheinbaum y Donald Trump, Ebrard la calificó como "una muy buena primera llamada", resaltando el potencial para la colaboración entre ambos países y la solidez del tratado comercial que los une.
El secretario Ebrard también se refirió al panel de controversias del T-MEC sobre el maíz transgénico, aclarando que el proceso aún no ha concluido y que el gobierno mexicano sigue trabajando para defender sus intereses.