Entre los cambios más destacados se encuentra la fusión de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) y el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), que se integrarán en un nuevo organismo descentralizado bajo la Secretaría de Economía. Este movimiento tiene como objetivo primordial garantizar la competencia en los mercados y prevenir la formación de monopolios, en línea con lo estipulado en el Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC).
Sheinbaum enfatizó que, a pesar de la reestructuración, el nuevo organismo mantendrá su independencia técnica, lo que es crucial para preservar sus funciones de supervisión económica y regulación en telecomunicaciones. “La función principal de estos organismos será garantizar la competencia y evitar monopolios, como ocurre en Estados Unidos”, subrayó la presidenta, asegurando que la soberanía de México no se verá comprometida.
En cuanto al proceso de designación del titular del organismo fusionado, la presidenta mencionó que podría ser designado por el Ejecutivo o, en su defecto, ratificado por el Senado. Los detalles sobre este procedimiento se definirán en la legislación secundaria, que aún está en desarrollo. Además, se contempla la participación de ciudadanos en el proceso de nombramiento para asegurar la independencia técnica del nuevo ente regulador.
Otro aspecto relevante de la reforma es la desaparición del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai) como organismo autónomo. Las funciones del Inai serán asumidas por una nueva área dentro de la Secretaría Anticorrupción y de Buen Gobierno, con el propósito de optimizar costos operativos y mejorar la eficiencia. “Se mantienen los criterios que originalmente constituyeron al Inai, pero sin la necesidad de grandes estructuras o gastos innecesarios”, afirmó Sheinbaum.
Además de los cambios en el IFT, Cofece y el Inai, la presidenta destacó que esta reforma no solo busca mejorar la administración pública, sino también cumplir con los compromisos internacionales de México en materia de competencia económica y transparencia. La reestructuración pretende equilibrar el cumplimiento de tratados internacionales con el fortalecimiento de la soberanía nacional, especialmente en la regulación de sectores clave como telecomunicaciones y competencia.
Con estas modificaciones, el gobierno mexicano se propone establecer un modelo más eficiente y adaptado a las necesidades actuales del país, manteniendo su compromiso de promover la competencia económica y el acceso a la información de manera más ágil y acorde con las nuevas realidades del mercado global.