El primer caso, ocurrido en la colonia S.C.O.P., involucra un conflicto familiar que escaló a niveles alarmantes. Un hombre de 49 años fue secuestrado por su propio hijo en su propia casa, ubicada en la calle Presa Santa Engracia. El hijo, cuyo nombre no ha sido revelado por las autoridades para proteger la identidad de la víctima, lo mantuvo retenido durante aproximadamente una hora, mientras lo amenazaba de muerte y le exigía una suma de dinero. La víctima logró escapar momentáneamente bajo el pretexto de ir a un cajero automático, aprovechando la oportunidad para llamar al 911.
"Ante el temor de ser agredidos, el hombre pidió a su esposa que se refugiara en una habitación, mientras él intentaba manejar la situación," declararon fuentes policiales. La rápida intervención de la policía municipal permitió la detención del agresor, quien intentó huir al percatarse de la llegada de las autoridades. Ahora, se encuentra a disposición del Ministerio Público para determinar su culpabilidad y las sanciones correspondientes.
Por otro lado, y en un giro inesperado, un incidente vial en el fraccionamiento La Victoria, en el cruce de las calles Profesor Alberto Sánchez y Profesora María Valdez, condujo a una segunda detención. Un hombre identificado como Christopher Ernesto, de 24 años, fue detenido después de casi impactar su vehículo, un Chevrolet Aveo color guinda, contra una patrulla policial. La situación se agravó cuando se descubrió que el vehículo portaba dos placas delanteras: una de Hidalgo, coincidente con la tarjeta de circulación, y otra de Nuevo León, sin registro.
La falsificación y uso de documentos son los cargos que enfrenta Christopher Ernesto ante el Ministerio Público. Su comportamiento, además de la irregularidad de las placas, se vio agravado por sus insultos hacia los oficiales durante la detención. Este hecho subraya la importancia de la verificación vehicular y el combate a las prácticas ilegales que buscan evadir la ley.
Ambos sucesos, aunque distintos en su naturaleza, muestran la necesidad de fortalecer la seguridad y la aplicación de la ley en Guadalupe, Nuevo León. La investigación de ambos casos continúa.