Captura en Monterrey: Fugitivo del FBI tras 12 años

El jueves pasado, la tranquilidad de la ciudad se vio interrumpida con la detención de Arnoldo Jiménez, un hombre de 42 años originario de Texas. Aunque su rostro no era conocido en las calles regiomontanas, su nombre resonaba con fuerza en los archivos del FBI.
Jiménez, incluido en la lista de los diez fugitivos más buscados del FBI, con una recompensa de 250 mil dólares por su captura, era buscado por un crimen particularmente atroz: el asesinato de su esposa, Estrella Carrera, de tan solo 26 años.
El escalofriante detalle: el crimen ocurrió en la noche de bodas de la pareja, el 12 de mayo de 2012, en Burbank, Illinois. "Fue encontrada sin vida al día siguiente en la bañera de su departamento", revelaron fuentes cercanas a la investigación. La investigación apuntó a que Estrella fue asesinada la misma noche en que se había unido en matrimonio con Jiménez.
La búsqueda de Jiménez se extendió por más de doce años. Inicialmente, la recompensa ofrecida por el FBI era de 100 mil dólares, pero en mayo de 2023, ante la falta de avances, se incrementó significativamente a 250 mil dólares. Esta acción denota la seriedad del caso y la determinación de las autoridades para llevar al asesino ante la justicia.
La detención, resultado de la colaboración entre autoridades mexicanas y estadounidenses, incluyendo la participación de elementos de la Interpol provenientes de la Ciudad de México, tuvo lugar en algún punto de Nuevo León. Sin embargo, el lugar exacto de la captura, el tiempo que Jiménez permaneció en la entidad y sus actividades durante su estancia, se mantienen bajo reserva.
Se sabe que Jiménez ya ha sido extraditado a los Estados Unidos, para enfrentar las consecuencias de sus actos. El misterio, sin embargo, persiste alrededor de los detalles que rodean su vida en Monterrey durante estos doce años de clandestinidad.