Estos uniformados se distribuirán entre los municipios de San Luis Río Colorado, Nogales, Sonoyta, El Sásabe, Naco y Agua Prieta. Su tarea principal será reforzar la vigilancia en la frontera para prevenir el tráfico de drogas, especialmente fentanilo, el ingreso ilegal de armas a México y el combate a la violencia en la región.
Se desplegarán 400 elementos en San Luis Río Colorado, 400 en Nogales, 200 en Sonoyta, 100 en El Sásabe, 200 en Naco y 200 en Agua Prieta. Para enviar estos elementos a la frontera, Quintana Roo ha reorganizado su estrategia de seguridad. Se retirarán 800 agentes de la Guardia Nacional del estado, representando menos de un tercio de la fuerza operativa actual. Sin embargo, autoridades aseguran que la seguridad no se verá comprometida gracias al apoyo de la Secretaría de Marina y la Defensa Nacional.
Este refuerzo responde a los acuerdos entre la presidenta Claudia Sheinbaum y el presidente Donald Trump para mitigar el tráfico ilegal y la migración.