Sheinbaum y Trump dialogan sobre tráfico de armas hacia México

Recientemente, la presidenta Claudia Sheinbaum mantuvo una conversación telefónica con Donald Trump, presidente de Estados Unidos, abordando la problemática del flujo ilegal de armas hacia México. Un tema, cabe recordar, que ha generado tensiones históricas entre ambos países.
Durante la llamada, según fuentes oficiales, Sheinbaum reiteró la preocupación del gobierno mexicano por el alto porcentaje de armas de alto calibre incautadas en México que provienen de Estados Unidos. "De las armas de alto calibre incautadas en México, el 74% provienen de los Estados Unidos," señaló el Fiscal General Alejandro Gertz Manero, citando un reporte del Departamento de Justicia de Estados Unidos. Esta cifra, reflejo de una realidad alarmante, subraya la urgencia de acciones conjuntas.
Se menciona que Trump respondió a las peticiones de Sheinbaum, aunque los detalles específicos de dicha respuesta no han sido revelados públicamente en su totalidad. La mandataria mexicana enfatizó la importancia de detener el flujo de armas, rechazando categóricamente una propuesta —no especificada en los reportes— relacionada con la presencia militar estadounidense en territorio mexicano. “Ustedes en su territorio, nosotros en el nuestro. Podemos compartir información, pero nunca vamos a aceptar la presencia del ejército de Estados Unidos en nuestro territorio,” afirmó Sheinbaum, destacando la postura firme de México en defensa de su soberanía.
El impacto del tráfico de armas en México es devastador. Más de 450,000 asesinatos, según cifras oficiales, están relacionados con la violencia del narcotráfico, un flagelo alimentado en gran medida por el fácil acceso a armamento de alta potencia. Esta situación exige una respuesta contundente que involucre no solo la cooperación internacional, sino también estrategias integrales de prevención y control a nivel nacional.
El contexto histórico de esta problemática, que se remonta a décadas atrás, ilustra la complejidad de encontrar soluciones efectivas y duraderas. La colaboración entre ambos países, respetando la soberanía nacional, parece ser el camino a seguir para afrontar este desafío compartido.