Niñas pierden la vida en enfrentamiento armado en Badiraguato, Sinaloa

La Fiscalía General de la República (FGR) ha tomado el mando de la investigación tras un trágico incidente en Badiraguato, Sinaloa, donde la vida de dos niñas se vio truncada. El suceso ocurrió durante un enfrentamiento entre un grupo armado y fuerzas estatales, un hecho que ha conmocionado al país.
El martes pasado, la Fiscalía General del Estado (FGE) abrió siete carpetas de investigación. Inicialmente, se reportó el hallazgo de tres cuerpos sin vida cerca de un Jeep en el ejido La Lapara, ubicado en la sindicatura de Cieneguilla. Sin embargo, el escenario pronto se tornó mucho más complejo.
Mientras un convoy de agentes de investigación, peritos, forenses y ministerios públicos, escoltados por el ejército, se dirigían a la zona, fueron emboscados. Los primeros reportes hablaban de un ataque en curso y una petición urgente de refuerzos. Posteriormente, la situación se agravó: cinco heridos, entre ellos una familia que se vio atrapada en el fuego cruzado.
La tragedia alcanzó su punto más doloroso con la confirmación de la muerte de dos niñas menores de diez años, cuyos nombres se mantienen bajo reserva para proteger la intimidad de la familia. Además, cuatro adultos y un adolescente resultaron heridos. Entre los sobrevivientes se encuentran Anabel “N” (40 años), Saúl “N” (45 años), Gael “N” (12 años), y otra persona cuya identidad aún no ha sido revelada completamente. Los heridos fueron evacuados en helicópteros a un hospital en Culiacán para recibir atención médica urgente.
“La FGR asumió la investigación para garantizar una indagatoria exhaustiva y transparente,” se puede deducir de las declaraciones oficiales, aunque aún no hay información oficial que lo confirme. La investigación está en curso y se espera que arroje luz sobre este lamentable suceso y las responsabilidades correspondientes. Las familias de las víctimas se encuentran devastadas, con la esperanza de obtener justicia y alguna explicación a lo ocurrido. El suceso ha generado una ola de indignación entre los habitantes de la región, quienes exigen mayor seguridad y una resolución definitiva del caso.