Aumenta la cantidad de migrantes atendidos en Albergue San Juan Bosco
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El diario de Sonora
el 21/12/2015 12:00 AM, Sección Nogales
Última edición 03/05/2024 05:50 PM.
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Última edición 03/05/2024 05:50 PM.
Nogales.
Desde el inicio de la temporada de invierno el número de personas deportadas ha aumentado.
En un diez por ciento aumentó el número de migrantes que son recibidos en el Albergue San Juan Bosco de esta frontera, de los cuales algunos son deportados y vienen con lesiones desde ligeras, hasta fracturas y otras de consideración, según lo confirmó la señora Hilda Irene Esquer Félix.
La representante legal y fundadora del albergue confirmó que desde el inicio de la temporada de invierno el número de personas deportadas ha aumentado y que al mes, reciben por lo menos a 25 migrantes, en promedio, con lesiones.
Si bien los aspirantes a indocumentados son deportados estables y con curaciones que reciben en Estados Unidos, durante su estancia en el asilo pueden ser revisados continuamente por socorristas de la Cruz Roja Mexicana, delegación Nogales.
Los migrantes que requieran de apoyo, que estén lesionados o recuperándose, pueden permanecer aquí el tiempo que requieran, ya que son muchos los accidentados al cruzar la línea divisoria”, dijo Esquer Félix.
Comentó que en promedio en presentes fechas, el albergue recibe hasta 25 migrantes lesionados, los deportan convalecientes desde Estados Unidos y varios permanecen días en las instalaciones para terminar de recuperarse y después continuar con regreso a su estado de origen o intentar de nuevo cruzar hacia la unión americana.
Esquer Félix informó que el número de migrantes deportados que reciben en el asilo aumentó hasta en un diez por ciento en recientes fechas, ya que a diario llegan a pernoctar entre 70 a 80 connacionales o centroamericanos y hasta sudamericanos.
De esa cifra entre quince a veinte personas son mujeres o niños, quienes también en ocasiones llegan con lesiones o lastimaduras que se hacen al brincar el cerco, por caminar por el desierto, tropezar u otras situaciones que sufren”, añadió la fundadora del albergue.
En el lugar y después de que se recuperan, a los migrantes se les brinda orientación sobre qué pueden hacer y si deciden intentar de nuevo cruzar hacia Estados Unidos, les dan sobres con suero Vida Oral para que lleven y eviten deshidrataciones.
Desde el inicio de la temporada de invierno el número de personas deportadas ha aumentado.
En un diez por ciento aumentó el número de migrantes que son recibidos en el Albergue San Juan Bosco de esta frontera, de los cuales algunos son deportados y vienen con lesiones desde ligeras, hasta fracturas y otras de consideración, según lo confirmó la señora Hilda Irene Esquer Félix.
La representante legal y fundadora del albergue confirmó que desde el inicio de la temporada de invierno el número de personas deportadas ha aumentado y que al mes, reciben por lo menos a 25 migrantes, en promedio, con lesiones.
Si bien los aspirantes a indocumentados son deportados estables y con curaciones que reciben en Estados Unidos, durante su estancia en el asilo pueden ser revisados continuamente por socorristas de la Cruz Roja Mexicana, delegación Nogales.
Los migrantes que requieran de apoyo, que estén lesionados o recuperándose, pueden permanecer aquí el tiempo que requieran, ya que son muchos los accidentados al cruzar la línea divisoria”, dijo Esquer Félix.
Comentó que en promedio en presentes fechas, el albergue recibe hasta 25 migrantes lesionados, los deportan convalecientes desde Estados Unidos y varios permanecen días en las instalaciones para terminar de recuperarse y después continuar con regreso a su estado de origen o intentar de nuevo cruzar hacia la unión americana.
Esquer Félix informó que el número de migrantes deportados que reciben en el asilo aumentó hasta en un diez por ciento en recientes fechas, ya que a diario llegan a pernoctar entre 70 a 80 connacionales o centroamericanos y hasta sudamericanos.
De esa cifra entre quince a veinte personas son mujeres o niños, quienes también en ocasiones llegan con lesiones o lastimaduras que se hacen al brincar el cerco, por caminar por el desierto, tropezar u otras situaciones que sufren”, añadió la fundadora del albergue.
En el lugar y después de que se recuperan, a los migrantes se les brinda orientación sobre qué pueden hacer y si deciden intentar de nuevo cruzar hacia Estados Unidos, les dan sobres con suero Vida Oral para que lleven y eviten deshidrataciones.
