El Diario de SonoraNogales, Son
La reducción de los espacios en las viviendas en fraccionamientos, provocan hacinamiento en las familias y generan aumento en los presupuestos para las políticas públicas en materia de prevención.
El director de Desarrollo Social del gobierno de la ciudad, Alejandro Castro Sandoval manifestó de la existencia de problemas en el seno familiar, desórdenes en los jóvenes y falta de intimidad en las parejas.
“Si a esto le agregamos el hacinamiento, la cosa se complica más”, expresó, “causando aumento en los costos económicos al desarrollo social, en los programas de prevención de conductas antisociales”.
Calificó como una “aberración” de los políticos o funcionarios, llamar “vivienda digna” a una construcción, cuando los padres deben de sacar la mesa para tener espacio para la cama.
De ser tan digna como las califican esos titulares de dependencias que todavía persisten, señaló, porqué esos servidores públicos no adquieren una casa similar para vivir en ella y sus familias.
“Por el contrario, siempre buscan o buscamos las casas más grandes cuando existe la posibilidad”, subrayó, “en tanto los que menos tienen, los acorralan o obligan que se hacinen en condiciones inhumanas”.
Esta situación debe de cambiar porque desde particular punto de vista, agregó, hay violaciones a los derechos humanos al confinar a las familias a un espacio carente de privacidad y desarrollo para sus integrantes.
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