La ciudad ha alcanzado los 100 grados Fahrenheit durante 100 días consecutivos, superando el récord anterior de 76 días establecido en 1993. Este calor persistente, que comenzó en mayo, ha tenido un impacto significativo en la vida cotidiana de los residentes, desde la venta de bebidas frías en los partidos de béisbol hasta la preocupación por la salud pública.
Las autoridades sanitarias del condado de Maricopa han reportado 150 muertes relacionadas con el calor hasta el 24 de agosto, y se están investigando otras 443. Este número ya supera las 645 muertes relacionadas con el calor confirmadas en 2023.
Es un número que llama la atención, dijo el meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional, Sean Benedict. Las largas rachas de calor del desierto suelen ser interrumpidas por la lluvia, pero el monzón no ha aportado mucho.
El calor extremo no solo afecta la salud pública, sino que también tiene un impacto en la economía. Las empresas se esfuerzan por mantener la productividad mientras los empleados trabajan en condiciones desafiantes. Los servicios públicos trabajan arduamente para mantener el suministro de energía, y los sistemas de transporte público deben adaptarse a las altas temperaturas.