Agente de la Patrulla Fronteriza de Arizona arrestado por pornografía infantil
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Nicol Matuz ScottLa investigación, liderada por la Homeland Security Investigations junto con la policía de Gilbert, Arizona, se remonta a noviembre del año pasado. Su objetivo: combatir la explotación sexual infantil. Fue durante una operación enfocada en el rastreo de archivos compartidos a través de software peer-to-peer que se obtuvo una pista crucial.
El 2 de noviembre, las autoridades federales detectaron la descarga de imágenes potencialmente ilegales desde un dispositivo ubicado en una residencia específica. Ese dispositivo, según las investigaciones, pertenecía a Jason Michael Drown, un hombre de 40 años que, hasta hace poco, se desempeñaba como agente de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos.
El arresto de Drown se llevó a cabo el 8 de abril. En el momento de la detención, se confiscó un ordenador de sobremesa Dell. Durante una entrevista posterior, luego de ser informado de sus derechos (Miranda rights), Drown negó haber compartido pornografía infantil. Ante la pregunta sobre la presencia de dichas imágenes en su computadora, su respuesta, según los registros, fue un simple: “¿okay?”, tras lo cual solicitó un abogado.
Actualmente, Drown enfrenta 10 cargos por delitos graves de explotación sexual de menores, y se encuentra detenido en la cárcel del condado de Maricopa con una fianza de $150,000 dólares. Otros dispositivos electrónicos de su propiedad están pendientes de análisis forense.
La Oficina de Responsabilidad Profesional del Departamento de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) está revisando el caso, mientras la investigación criminal continúa. En un comunicado, CBP afirmó que “la gran mayoría de los empleados y oficiales de CBP cumplen con sus deberes con honor y distinción, trabajando incansablemente cada día para mantener segura a nuestro país”, reiterando que la detención no implica culpabilidad hasta que se demuestre lo contrario en un tribunal.
La investigación sigue su curso, y el desenlace de este caso, que pone en jaque la imagen de una institución de seguridad, aún está por verse.
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