Plataformas como Instagram se han convertido en un espacio donde jóvenes como Shayastha Agrawal, de 21 años, encuentran resonancia con sus propias luchas internas.
Shayastha, residente de Delhi, siempre se ha sentido frustrada por su incapacidad para completar tareas y su dificultad para recordar cosas. "Todos me regañan porque dejo las tareas a medias y a veces me cuesta recordar las cosas que tengo que hacer. Pero otros días estoy tan emocionada que puedo terminar cualquier cosa de inmediato. Siempre he vivido odiándome a mí misma", confiesa.
Su experiencia no es única. La falta de información sobre la salud mental, especialmente en el pasado, ha llevado a que muchas personas se sientan aisladas y confundidas. Shayastha, por ejemplo, llegó a creer que podía ser esquizofrénica debido a las fluctuaciones en su comportamiento.
Sin embargo, las redes sociales han abierto un nuevo camino para la comprensión y la conexión. Shayastha encontró un video en Instagram sobre la vida de una persona con TDAH, lo que le permitió reconocerse en la historia. "Me diagnosticaron y me enseñaron comportamientos que me ayudan a sobrellevar los días en que no puedo hacer mucho", relata.
La accesibilidad a la información también ha impulsado a jóvenes como Aaria Varma, de 15 años y residente de Mumbai, a tomar acción. Aaria, quien también vive con TDAH, ha creado su propia plataforma llamada Zen Z, un podcast que aborda temas de salud mental como ataques de pánico, TDAH, dislexia y las presiones de la vida moderna para los jóvenes.
"Siento que necesitamos información precisa y accesible. Los trastornos mentales son un problema creciente, pero no tenemos suficiente apoyo para ello. Quería darles a otros un espacio seguro para que no se sientan solos", explica Aaria.
La psicóloga Aarti Khanna destaca la importancia de la relatabilidad en la salud mental. "Las personas responden mejor a la información cuando proviene de alguien familiar, de la misma edad, del mismo origen, con las mismas condiciones de salud", afirma.
Si bien la información por sí sola no siempre es suficiente para el diagnóstico y el tratamiento adecuado, es un paso importante hacia la comprensión personal. A través de las experiencias compartidas, las personas pueden dejar de vivir con vergüenza y miedo, reconociendo que no están solos.