El Servicio Nacional de Salud del Reino Unido recomienda 150 minutos de ejercicio a la semana, no solo para mantenernos en forma, sino también para mejorar nuestra salud mental.
Un estudio reciente reveló que, si bien el ejercicio físico puede ayudar con problemas como la ansiedad y la depresión, los videojuegos son mucho más efectivos para mejorar la memoria, la atención, el pensamiento y el razonamiento.
El profesor Adrian Owen, neurocientífico de la Universidad Western de Canadá, llevó a cabo un estudio que investigó las conexiones entre la salud y el estilo de vida. Owen descubrió que "las personas que juegan videojuegos con frecuencia, es decir, cinco o más horas por semana a un solo tipo de juego, se desempeñaron cognitivamente, en promedio, como personas que eran 13.7 años más jóvenes (que ellos)".
El estudio, realizado por el profesor Owen y otros investigadores del Science Museum Group, encuestó a 1,000 adultos de entre 18 y 87 años. Se les preguntó sobre sus condiciones médicas, nivel educativo y situación laboral.
Owen señaló que "me sorprendió que los videojuegos mejoraran la cognición, mientras que el ejercicio regular no, en parte porque en el pasado hemos demostrado de manera concluyente que los juegos de 'entrenamiento cerebral' computarizados no mejoran la función cognitiva. Sin embargo, los tipos de juegos que los jugadores frecuentes juegan hoy en día son realmente muy diferentes de los juegos de entrenamiento cerebral para consumidores".
Los jugadores que participaron en el estudio mencionaron una amplia variedad de juegos como Minecraft, Grand Theft Auto y Mario Kart. Parecía que cualquiera que jugara estos juegos populares con frecuencia tenía una mejor función cognitiva.
Owen explicó que "típicamente, (los videojuegos) son muy atractivos, estratégicos y pueden mejorar la atención visual y la velocidad de procesamiento, y las habilidades para resolver problemas, a través de la repetición y la práctica intensas. Cualquier jugador también sabe que estos juegos están diseñados para activar los sistemas de recompensa del cerebro, lo que lleva a la liberación de neurotransmisores como la dopamina. Esto también puede tener efectos a largo plazo en la función cognitiva".
Sin embargo, no solo el efecto de los videojuegos en la cognición impresionó a los investigadores, sino también la falta de efecto que tuvo el ejercicio. Owen mencionó que "en cuanto al ejercicio que no afecta la cognición, eso también fue una sorpresa, dadas las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud de que el ejercicio moderado puede beneficiar la cognición. Sin embargo, solo observamos los efectos a largo plazo del ejercicio regular, por lo que es posible que una ráfaga corta de ejercicio vigoroso sí afecte la cognición, como muchas personas informan sentirse 'más agudas' después de un entrenamiento".