Luis Severino guía a Yanquis

NUEVA YORK.

Lanza seis rollos en su quinto triunfo de la campaña; Azulejos no ceden.
El abridor dominicano Luis Severino lanzó pelota de cinco imparables en seis innings el domingo, Dustin Ackley pegó jonrón para echarse a cuestas una ofensiva de Nueva York cerca del final y los Yanquis se acercaron a un puesto en playoffs con una victoria de 6-1 sobre los Medias Blancas de Chicago.
Severino (5-3) indujo tres jugadas de doble matanza al dominar a los Medias Blancas en su 10ma apertura en Grandes Ligas, ayudando a los Yanquis a reducir su número mágico a tres con el que al menos aseguraría un puesto de comodín.
Nueva York se colocó a una victoria de las 10.000 en su historia en temporada regular.
Justin Wilson permitió un cuadrangular al emergente venezolano Avisail García en la séptima entrada. Dellin Betances se hizo cargo del octavo episodio y Bryan Mitchell cerró para que Nueva York mejorara su foja a 65-2, la mejor de Grandes Ligas, cuando tiene la ventaja en la pizarra tres seis capítulos.
Los Medias Blancas terminaron su calendario de juegos de visitante con record de 36-45, tres triunfos por encima de su marca del año pasado.

Donaldson viste
de héroe
TORONTO, Can.- Josh Donaldson conectó un jonrón solitario el domingo, cuando había dos outs en la parte baja de la novena entrada, para llegar a 41 bambinazos en el año y abrir la puerta al triunfo de los Azulejos de Toronto, por 5-4 sobre los Rays de Tampa Bay.
Los Azulejos, que jugarán los playoffs, disputaron su último encuentro de la campaña regular en casa. Toronto aparecerá en la postemporada por primera ocasión desde 993 y se acercó a la conquista del título de la División Este de la Liga Americana.
Donaldson retiró a Steve Geltz (2-6) para que Toronto llegara a 222 vuelacercas en el año, la mejor cifra de las Grandes Ligas.
Justin Smoak pegó tres imparables, incluido un jonrón de dos carreras, y los Azulejos finalizaron con la mejor foja de la Americana en casa, de 53-28.
Brett Cecil (4-5) resolvió la parte alta de la novena entrada, antes de que Donaldson desatara la algarabía en el Rogers Centre con su cuadrangular.