Impacto deportivo/El beisbol en Nogales

En 1945 se formó la primera liga organizada de béisbol ¨Liga Municipal de Béisbol¨ cuyo primer presidente fue el profesor Elizardo Sánchez, tesorero Ramiro Romero y alto comisionado Fernando Ramírez. Había ocho equipos: Águilas, Aliados, Camioneros, Colonia, Correos y Telégrafos, Secundaria, A.C.J.M. y Luz y Fuerza.

El 15 de abril de 1955 se inauguró el alumbrado en un juego de la Liga Arizona-México jugando los Cowboys de Tucson vs. Yaquis de Nogales.

El día 20 de marzo de 1964 siendo presidente municipal el señor Jesús Francisco Cano se reconstruyó el estadio ¨Hoeffer¨ y fue reinaugurado en un juego de exhibición entre los equipos de ligas mayores Indios de Cleveland vs Cachorros de Chicago.

Después en la administración del señor Abraham Zaied Dabdoub se le dio otra remozada al estadio, desde entonces a la fecha se le han hecho algunas reparaciones y mejorías menores.

La liga municipal de béisbol ha jugado sus partidos desde hace 76 años ininterrumpidos en diferentes campos (1-2-3) (doctor Castro) (Rocssa) (Kinkas Valencia) y desde luego el ¨doctor. Alberto Hoeffer¨. Por muchos años se tiene un promedio de entre 45-50 equipos que participan en diferentes categorías que juegan en 2 etapas: verano e invierno.

Por muchas temporadas el ¨Hoeffer¨ albergó a la fuerte ¨Liga mañanera¨ en los años 60 y 70. A la ¨Liga Burócrata¨, la ¨Liga Industrial¨; también se han jugado torneos estatales de la propia liga municipal, ligas pequeñas y juveniles, además importantes torneos de softbol. También éste estadio fue escenario de tablas de ejercicio de las escuelas locales al finalizar los desfiles ¨deportivos¨ del 20 de noviembre, donde había competencias muy vistosas. También ha sido cada de equipos de Nogales en importantes ligas profesionales como: ¨Liga Arizona-Texas¨, ¨Arizona-México¨, ¨Norte de Sonora¨, ¨Liga Profesional de

Verano¨, ¨Norte de México¨, ¨Regional Norte¨ y otras más.

Pero no todo ha sido positivo en el ¨Hoeffer¨ ya que por muchos años y rompiendo el acuerdo para el cuál fue donado el terreno, negocios voraces relacionados con espectáculos como las fiestas de mayo, bailes populares, carreras de motos, corridas de toros y eventos religiosos, destrozaron la magnífica instalación que en una época fue considerada como uno de los mejores estadios del noroeste del país, que aprobaba inspección de las ligas mayores para que sus equipos jugaran partidos de exhibición.

Hasta la próxima.