Se requirió de un error grosero para que el París Saint-Germain lograra la victoria en su primer partido dentro de la Liga de Campeones en una nueva era del club, ya sin su constelación de figuras.
El conjunto francés se impuso el miércoles en casa 1-0 sobre el Girona, debutante en el torneo, gracias a un tanto en los descuentos, luego que el arquero argentino Paulo Gazzaniga permitió que un centro del portugués Nuno Mendes se le escapara entre las manos y las piernas.
Por primera vez en más de una década, el PSG comenzó su campaña en la Liga de Campeones sin al menos un astro de gran renombre.
Cracks como Zlatan Ibrahimovic, el uruguayo Edinson Cavani, el brasileño Neymar, Kylian Mbappé y el argentino Lionel Messi llegaron y se fueron sin ganar la competencia más importante de clubes en Europa. Ahora, el PSG comienza un nuevo año futbolístico apostando a una nueva identidad, basada más en jugadores franceses y en un mayor trabajo colectivo.
Fue el primer encuentro del PSG en la Liga de Campeones sin Mbappé en siete años. El astro francés se unió al Real Madrid y anotó el martes con su nuevo club en este certamen.
Los críticos de Mbappé solían reprocharle el no retroceder lo suficiente para ayudar en la recuperación de la pelota después de que se lanzaba al frente con el PSG.
Ahora, fue posible oír los gritos del entrenador Luis Enrique cuando sus dirigidos no ejercían esas labores de recuperación. En un momento, Girona conservó la pelota por dos minutos y medio, mientras los jugadores del PSG eran meros observadores o perseguidores.
“Ellos defendieron bien y nosotros tuvimos dificultades para generar oportunidades claras”, comentó el estratega español.
A los 34 minutos, comenzaron a sonar los silbidos del público en un apagado Parque de los Príncipes. Salvo por algunas oportunidades de Warren Zaïre-Emery y Marco Ascencio —quien se fue lesionado al final de la primera mitad por una aparente lesión de isquiotibiales—, hubo poca claridad adelante.
Pero en la recta final, la pifia de Gazzaniga salvó al PSG.
“No jugamos muy bien, y tenemos que decirlo”, indicó el volante del equipo parisiense Vitinha. “Tuvimos dificultades para conservar el balón. Hay que darle el crédito al Girona, pero tenemos que mirar lo que no hemos hecho bien”.