El equipo, que ha estado presente en los playoffs durante las últimas tres temporadas, celebró su victoria con una convincente victoria de 6-2 sobre los Cachorros de Chicago.
La victoria, que le otorga a los Filis el campeonato divisional número 12 de la franquicia, llegó con una dosis extra de sabor.
"Sabemos que tenemos un gran panorama por delante", comentó Kyle Schwarber, uno de los héroes de la noche, quien conectó un jonrón junto con J.T. Realmuto, encendiendo la euforia de los fanáticos. Schwarber continuó: "Ganar la división es algo grande. No es una división fácil de ganar. Nunca ha sido una división fácil de ganar. Definitivamente será algo genial".La alegría se extendió por el equipo, que ahora tiene la mira puesta en el primer sembrado en los playoffs de la Liga Nacional. Con un récord de 93-64, los Filis se encuentran en el segundo lugar, solo por detrás de los Dodgers de Los Ángeles (93-63), lo que les aseguraría un descanso en la primera ronda de la postemporada.
El camino hacia la victoria fue largo y difícil, pero los Filis demostraron su determinación al superar a los Bravos de Atlanta, quienes habían dominado la división durante seis años consecutivos. Filadelfia arrebató el liderato el 3 de mayo y no ha mirado atrás desde entonces, recordando a sus aficionados los gloriosos años de 2007 a 2011, cuando ganaron cinco títulos consecutivos de la División Este de la Liga Nacional.
Los Filis, con su regreso a la cima, buscan emular las hazañas de 1980 y 2008, años en los que se coronaron campeones de la Serie Mundial. Con el corazón puesto en el título, los Filis ahora están a punto de comenzar una nueva aventura, con la esperanza de llevar a casa el trofeo que tanto anhelan.
La energía en Filadelfia es palpable, y la ciudad está lista para celebrar la llegada de una nueva era para su equipo de béisbol. La historia está en marcha, y solo queda esperar para ver hasta dónde llegará este equipo, que ha demostrado su capacidad de luchar y conquistar.