No se trataba de una victoria inesperada ni de una jugada épica en el campo. Era la llegada de Tom Brady, el legendario mariscal de campo, ahora en un nuevo rol: copropietario minoritario del equipo.
Mark Davis, el dueño mayoritario, emanaba una alegría contagiosa, un contraste curioso considerando el inicio de temporada irregular de su equipo con un 2-4 en el marcador. "¡Hola, chicos!" saludó Davis con una sonrisa de oreja a oreja mientras los reporteros se agolpaban en la sala de prensa.
La expectación por la llegada de Brady era palpable. Un grupo de empleados esperaba ansiosamente en el vestíbulo principal. Brady, con un micrófono inalámbrico para compartir unas palabras, parecía inyectar un soplo de aire fresco en la atmósfera.
El entrenador de los Raiders, Antonio Pierce, no ocultó su admiración: "Tengo un respeto absoluto por Tom Brady. Es un profesional en toda regla, un luchador. Toda su vida ha sido un desafío."
"Sé que miramos el resultado final y vemos los campeonatos y la etiqueta de ‘GOAT’ (más grande de todos los tiempos), pero se ha esforzado mucho. Se ha esforzado mucho para tener esta oportunidad de ser copropietario minoritario con los Raiders. Y creo que hay un valor añadido siempre que puedas contar con alguien que ha tenido éxito y ha luchado y no es alguien que ha tenido privilegios", afirma Pierce.
La partida reciente de Davante Adams, uno de los mejores receptores de la liga, dejó un eco de incertidumbre en el vestidor. Sin embargo, la presencia de Brady infundió una nueva dosis de entusiasmo en el ambiente.
Aidan O'Connell, el mariscal de campo que tomó las riendas de la ofensiva hace dos semanas, expresó su deseo de aprender del siete veces campeón del Super Bowl: "Sé que está bastante ocupado, pero cualquier tiempo que tenga, definitivamente aprovecharé para aprender de él. Obviamente es grande tener a una persona así en un equipo de la NFL. Es alguien que ha actuado durante tanto tiempo al más alto nivel, y puedes aprender mucho sólo en las cosas que dice. Incluso sólo su presencia es increíble para nosotros".
Maxx Crosby, capitán de la defensa, confía en que la naturaleza competitiva de Brady se extenderá por todo el equipo: "Él es el competidor por excelencia. Yo sé, personalmente, que ése es el tipo de personas con las que me asocio, y creo que tenerlo cerca simplemente aporta valor y cultura del triunfo".