Bubic domina; Reales aplastan a Cerveceros 11-1

En el Miller Park, el ambiente estaba cargado de expectación para el juego inaugural en casa de los Cerveceros de Milwaukee. Sin embargo, la noche se tornó agridulce para los locales, quienes sufrieron una contundente derrota ante los Reales de Kansas City con un marcador final de 11-1.
La clave del triunfo de Kansas City radicó en la sólida actuación de Kris Bubic. En su primera apertura en casi dos años, después de someterse a una cirugía Tommy John en abril de 2023, el zurdo de 27 años dominó la lomita. Bubic (1-0) lanzó seis entradas sin permitir carreras, ponchando a ocho bateadores y permitiendo solo tres hits y dos bases por bolas. "Fue una sensación increíble volver a la lomita y contribuir a la victoria del equipo", se podría imaginar diciendo Bubic, marcando un regreso triunfal después de un largo periodo de rehabilitación.
El ataque de los Reales fue liderado por los venezolanos Maikel García y Salvador Pérez. García conectó un enorme jonrón de 428 pies al jardín central en la segunda entrada, mientras que Pérez añadió otro cuadrangular de 418 pies en la séptima. Ambos batazos fueron vitales para ampliar la ventaja de Kansas City.
Por el lado de los Cerveceros, la situación se presenta complicada. Jonathan India, quien un día antes recibió un pelotazo de 98.9 mph en el rostro, conectó tres hits e impulsó dos carreras, demostrando su resistencia y valentía. Sin embargo, la ofensiva del equipo no fue suficiente para contrarrestar el pitcheo de Bubic y la potencia ofensiva de los Reales.
La derrota deja a los Cerveceros con un preocupante récord de 0-4, su peor inicio desde 2015. Han sido superados por un marcador acumulado de 47-15 en sus primeros cuatro juegos, incluyendo una barrida en su serie inaugural en el Yankee Stadium. A esto se suma la expulsión del coach adjunto Rickie Weeks por discutir con el umpire Brennan Miller. El equipo enfrenta un desafío importante para revertir esta tendencia negativa y recuperar el camino hacia la victoria.
En resumen, una noche para el olvido en Milwaukee, marcada por la excelente actuación de Bubic y el poder ofensivo de los Reales, frente a un equipo de Cerveceros que necesita encontrar respuestas rápidamente.