Draft WNBA 2024: Bueckers, Malonga y un futuro brillante

Se palpaba la energía de un nuevo capítulo en la historia de la WNBA, a punto de comenzar.
Más allá del brillo de las cámaras y los flashes, la historia giraba en torno a Paige Bueckers, la estrella de UConn, a quien se le auguraba un futuro brillante. Su semana había sido un torbellino: campeonato nacional con UConn, entrevistas en programas matutinos y nocturnos, y el desfile de campeones. Aun así, la emoción era innegable. “Dallas, estoy tan emocionada, un nuevo comienzo”, declaró, reflejo de una ambición que trasciende la cancha.
Pero la noche no era solo de Bueckers. Dominique Malonga, la estrella francesa de 19 años, fue seleccionada en segundo lugar por Seattle. Su historia, una muestra de la creciente proyección del baloncesto femenino francés, se suma a la narrativa de triunfo internacional. “Demostró que el baloncesto francés ha evolucionado”, comentó Malonga, haciendo referencia al impacto de jugadores como Victor Wembanyama en la NBA.
El draft continuó con una serie de selecciones notables: Sonia Citron (Notre Dame) por Washington Mystics, Kiki Iriafen (Southern Cal) también por Washington Mystics y Georgia Amoore (Kentucky), vestida por el mismo Russell Westbrook, añadieron un toque de glamour y expectativa al evento.
Las Golden State Valkyries, en su primera selección histórica, apostaron por Juste Jocyte de Lituania. Connecticut, por su parte, aprovechó selecciones consecutivas para asegurar a Aneesah Morrow (LSU) y Saniya Rivers (N.C. State). Sarah Ashlee Barker (Alabama), Ajsa Sivka (Eslovenia) y Hailey Van Lith (TCU) completaron la primera ronda con selecciones de Los Ángeles, Chicago y Dallas respectivamente. La ausencia de varios equipos, como Las Vegas (debido a una investigación de la liga), marcó una peculiaridad de esta edición.
La primera ronda del Draft WNBA 2024, sin duda, un evento lleno de talento, historias inspiradoras y un futuro prometedor para la liga.