Durante su aparición en "Hot Ones" en septiembre de 2019, Ashton Kutcher se mostró reticente al abordar el tema, indicando que hay muchos detalles que no puede compartir. Su tono ligero contrastó con la seriedad de las acusaciones actuales contra Sean "Diddy" Combs.
Kutcher y Combs coorganizaron una fiesta benéfica en 2009 para recaudar fondos para la organización 'Malaria No More', lo que sugiere una relación más allá de lo superficial. A pesar de la atención mediática sobre estas fiestas, no hay evidencia de que Kutcher o los demás asistentes estuvieran involucrados en actividades inapropiadas. Sin embargo, el actor compartió anécdotas sobre su amistad con Combs, describiendo su vínculo como "extraño" y entretenido.
El actor recordó un momento en que Combs se unió a él para correr, y durante la actividad, el rapero admitió que le estaba costando. Kutcher relató cómo, rodeados de paparazzi, Combs le pidió que bajara el ritmo para no dar una impresión negativa. Esta anécdota muestra un lado más humano de Combs, quien se sentía presionado por su imagen pública.
La detención de Combs ha traído atención sobre su estilo de vida y las acusaciones serias que enfrenta, que incluyen cargos de organización delictiva. Según la acusación, las fiestas de Combs han sido descritas como eventos problemáticos, y se mencionan preocupaciones sobre el bienestar de los involucrados.
Si es declarado culpable, Combs podría enfrentar un mínimo de 15 años de prisión. Esta situación ha llevado a Kutcher a ser cuestionado sobre su relación con el rapero, especialmente después de recibir críticas el año pasado por su apoyo a un condenado en un caso separado. Mientras Kutcher se mantiene bajo el escrutinio público, el caso de Combs sigue desarrollándose en un entorno mediático complejo.