La energía era palpable en el ambiente, la emoción se podía respirar en el aire. Sin embargo, la euforia se desvaneció en un instante cuando, a poco más de una hora del inicio del concierto, llegó la noticia que nadie esperaba: Timberlake canceló el show.
"Una lesión de último momento", según el comunicado que el propio cantante publicó en su cuenta de Instagram, lo obligó a tomar la difícil decisión de posponer la presentación. "Lamento profundamente esta situación, y les prometo que se los compensaré", escribió Timberlake a sus seguidores, quienes no pudieron ocultar su decepción.
El cantante no reveló detalles sobre la lesión, ni cómo ocurrió. El misterio sobre su estado físico se ha extendido como la pólvora, dejando a sus fans con más preguntas que respuestas.
La incertidumbre sobre el futuro de la gira de Timberlake se ha apoderado de la escena. El cantante está programado para presentarse en el Wells Fargo Center de Filadelfia este viernes, y hasta el momento no hay información sobre si esta lesión afectará su participación en ese concierto.
La cancelación del concierto en Newark ha dejado un sabor amargo en la boca de los fans, quienes esperan con ansias una pronta recuperación de Timberlake y la posibilidad de disfrutar de su música en vivo.