Lo que siguió fue un intenso proceso de rehabilitación física y emocional que el actor ha decidido compartir con el mundo en su especial de comedia en Netflix, What Had Happened Was....
Según Foxx, hay 20 días que no recuerda después de sufrir la emergencia médica. El actor explicó que su amigo lo llevó inicialmente a un médico en Atlanta, quien le administró una inyección de cortisona y lo envió de vuelta a casa. Sin embargo, fue su hermana, Deidra Dixon, quien tomó la decisión que le salvó la vida. Ella lo llevó al Hospital Piedmont en Atlanta, donde los médicos confirmaron la gravedad de su condición.
La experiencia de Foxx fue una segunda oportunidad en la vida. Después de permanecer en coma durante semanas, el actor enfrentó un golpe emocional al encontrarse en una silla de ruedas. No podía creer que había tenido un derrame cerebral, algo que no se ajustaba a su imagen de sí mismo. Sin embargo, su sentido del humor lo ayudó a superar la crisis.
La recuperación de Foxx fue ardua, pero su familia lo ayudó a superar la crisis cuando estaba hospitalizado. Su hija menor, Anelise Bishop, de 14 años, entró a su habitación con una guitarra y comenzó a tocar una canción favorita de ambos. Eso hizo que sus signos vitales se estabilizaran, y Foxx se sintió conmovido por el gesto.
Después de salir del hospital, el actor ingresó en un centro de rehabilitación en Chicago, donde tuvo que aprender desde cero habilidades básicas como caminar. Su familia lo protegió del escrutinio público, un gesto por el cual Foxx les agradeció profundamente. El especial concluyó con un emotivo agradecimiento a los médicos, enfermeros, amigos, familiares y al público que oró por él durante su crisis.
En cuanto a las teorías conspirativas que surgieron sobre su salud durante su recuperación, Foxx las desmintió con su característico humor. ¿De verdad pensaron que era un clon?, preguntó, riendo. El especial de Foxx es un testimonio de su fuerza y resiliencia en la cara de la adversidad.