Esta vez, la atención se centra en varios frentes, entrelazando historias personales con el futuro mismo del pueblo.
El inicio de la temporada celebra el 30 aniversario del Dr. Doc (Tim Matheson) como médico en Virgin River. Sin embargo, una llamada a domicilio y una posterior investigación sobre su licencia médica ponen en riesgo su legado. Simultáneamente, Hope (Annette O’Toole), alcaldesa y esposa del Dr. Doc, recibe una llamada que amenaza con alterar el futuro del pueblo: una gran red hospitalaria busca expandirse a Virgin River.
“Arrojan todo al aire profesionalmente para Doc en la séptima temporada,” afirma Patrick Sean Smith, showrunner de la serie. “También involucra a Hope como alcaldesa, quien busca proteger lo más valioso para ella: Doc y la integridad del pueblo.”
Mientras tanto, la compleja relación entre Brady (Ben Hollingsworth) y Lark (Elise Gatien) llega a su punto culminante. La estafa de Lark sale a la luz gracias a Brie (Zibby Allen), hermana de Jack, quien observa a Lark y al padre de su hijo, Jimmy, conspirar en la cárcel. La situación se complica aún más con el triángulo amoroso entre Brie, Brady y Mike (Marco Grazzini).
El evento central de la temporada, la boda de Mel (Alexandra Breckenridge) y Jack (Martin Henderson), se desarrolla con poca controversia, exceptuando la ausencia de Everett, el padre de Mel, por un problema de salud. Pero la felicidad recién estrenada se ve interrumpida por una serie de acontecimientos impactantes que cambian drásticamente el curso de la vida de varios personajes.
La decisión de Mel de adoptar al bebé de una de sus pacientes, Marley, plantea dilemas éticos y emocionales. La aparición de Marley tras la boda plantea un giro inesperado en el deseo de Mel y Jack de formar una familia, agregando una capa extra de complejidad a sus vidas. A esto se suma la situación de Charmaine (Lauren Hammersley), quien enfrenta la amenaza de Calvin, el padre de sus gemelos, y cuya ausencia en la boda y posterior situación desconocida al final del episodio deja un final abrupto y lleno de suspenso.
La serie, renovada por una séptima temporada, continúa explorando las complejidades de la vida en Virgin River, dejando al público con varias preguntas e intrigas que prometen una nueva etapa llena de desafíos para sus queridos personajes.